El sujeto y el acto: ¿Qué significa actuar?

“No, no, yo nunca adivino, es un hábito destructivo para la facultad lógica.”

Sherlock Holmes

Quizás el fenómeno más difícil de explicar en cada uno de nosotros como sujetos, es sin lugar a duda la noción del acto, acto que no es aquel que se piensa como desde lo dramatúrgico donde se ocupa un semblante necesariamente, sino acto en el sentido de la más pura acción que no revela sin más ni menos la orientación de nuestro deseo.

¿El Acto equivale a tomar decisiones?

Eso que los representantes de la psicología del Yo llaman “la toma de decisiones”, realmente si “se le pone el ojo”, el acto nada tiene que ver con tomar decisiones. ¿Cuántas veces el saber es insuficiente para nosotros poder “hacer algo”?  

El más claro ejemplo que viene en mente es pensar las separaciones de pareja, donde ya se sabe, por cuál sea la causa, que el estar con ese otro ya no es posible, pero no se sabe cómo actuar. Ya la decisión está tomada, desde hace un tiempo quizás, pero el cómo llevarla a cabo es la problemática humana porque el acto involucra un sacrificio, una forma de pérdida, no del otro, sino de algo íntimo y singular.

Esto me encantaría explicarlo desde un vago ejemplo de la fenomenología, entendida como el estudio de las formas de producción de conocimiento. Para ello, y ante el estudio de cualquier situación nos encontramos con preguntas como investigadores: ¿Qué es? ¿Por qué es? ¿Cómo funciona? ¿Para qué funciona? 

¿Qué tiene esto que ver con la noción del acto? 

Aquí podemos ejemplificar al sujeto en el lugar del investigador, y al objeto de estudio en tanto su situación donde como todo investigador, está incluido en ella. Cualquier observación implica algo de sí mismo, cualquier conclusión, de igual manera, en tanto el objeto de investigación está contaminado, así como nuestras elecciones, vivencias y vínculos están marcados de nuestros juicios e historia. 

Entonces, eso significa que desde el primer momento ya sabemos qué, es decir tenemos una explicación de lo que ocurre. Respecto al por qué ocurre un fenómeno, nos hacemos una idea para comprender. Sabemos incluso qué decisión debemos tomar, por lo tanto, que actos vamos a ejecutar, lo cual responde finalmente para qué hacerlo. 

Responsabilidad en nuestros actos

El problema siempre se inmiscuye bajo el ¿cómo hacerlo?, ¿cómo hacer y no perder? o en su defecto ¿cómo actuar aceptando que algo se pierde? Quizás si nos atrevemos a hablar con el beneficio y atrevimiento de la ironía diremos que incluso aquello que puede llamarse el horror al acto no es sino la aversión existente ante el saber algo inevitablemente perdido, porque lo que falta son las agallas y la responsabilidad de saber sobre sí mismo. 

El acto puede ser silencioso, a veces el mejor acto es la abstención de acción, o puede ser directivo, ejecutar acciones. Entonces, ¿qué es el acto? puede ser lo que usted quiera pensar, pero lo cierto es que lo único que lo define y hace ético, lo único que hace que sea una acción genuina es la posición que tengamos respecto al deseo por el saber, y esto ya es bastante que decir y dejar para pensar. 

Desde el psicoanálisis ejecutar un acto implica hacer un recorrido desde lo que se piensa hasta lo que se hace. Así lo plantea Jacques Alain Miller:

“todo acto verdadero implica una transgresión, el paso de cierto límite, el traspaso de un código, de una ley”*

Esto es el acto, no es una pretensión, no es una actuación, ni un imperativo. Tan solo poner en acto un pensamiento, por pequeño que sea, es poco ante los ojos, pero puede ser mucho para el alma. 

*Jacques Alain Miller (1993) Jacques Lacan: observaciones sobre su concepto de pasaje al acto, en: infortunios del acto analìtico. Atuel Buenos Aires, Argentina.

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3 comentarios sobre “El sujeto y el acto: ¿Qué significa actuar?”

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